martes, 8 de mayo de 2018

Agua es una palabra polisémica.





Agua, agua quiero que nace. Mientras, lluvia en los cristales deshaciendo los dolores de otras lluvias. Rocíos usados. Otras veces, para las mismas cosas. Agua, dame agua, pide el aire. Gota a gota, una, sola, en el recuerdo de lo amargo que no sabe. Agua, grita el agua, la cordura. Nieblas que acaparan los compases que dibujan líneas rectas hacia mares-boca, tan familiares que no entiendo. Agua, grita la niña del espejo. Niña. Ta. Ta. Ta. Rá. ¡Agua! Los papeles mojados, las vidas ajenas, la cabeza fría, la casa vacía, las maletas siempre abiertas. Agua que no sacia el miedo. Agua que no limpia. Agua, agua quiero, agua. Las manos de agua para tocar, con delizadeza, nuestro pán-ico de cada día.

d.