jueves, 6 de mayo de 2010

Enhorabuena, Marcos Sacristán.

Es un orgullo que haya salido elegido. Ha demostrado que merece confianza. Y nosotros, los estudiantes, nos lo hemos creído, era la única esperanza. A ver qué hace. Tenemos nuevo Rector de la UVa. Eso sí: en Filosofía y Letras nos quedamos sin Decano: Luis A. Santos formará parte del equipo de vicerrectores que elegirá Sacristán. Y yo, me alegro, después de todo. Una aprende que la política universitaria no es tan sencilla y que el politiqueo, es otra cosa muy distinta. Y eso, no dura. Ya lo hemos visto todos. Muchos cambios en muy poco tiempo; pero la sensación es satisfactoria. Hoy me da la gana decir que estoy orgullosa de la Mesa de Representantes de Alumnos de nuestra Facultad. Y del equipo decanal del que formo parte todavía. Y me alegra que, salvo excepciones muy concretas (que se quedan "triste(s) y sola(s)" como dice la canción tunera), todos los grupos claustrales (ADDE, Alternativa Universitaria, MAS Universidad y AJIO) hayan demostrado capacidad de trabajo, seriedad y compromiso con sus ideas; comulguemos con ellas o no. Ahora es un camino nuevo para la mejora, la reflexión y la coherencia. Un camino nuevo para todos. Y la elegancia y la honestidad, señores, no las perdamos de vista, que nunca sobran.


7 comentarios:

El Drac dijo...

Esos tiempos universitarios!!! que los disfrutes, yo por mi parte aprendí que muchos delegados viven años de años en la universidad; unha cosa increíble!! Un abrazo

Dama Atómica dijo...

Jo, niña, me encanta lo seria que te pones con ciertas cosas. Un beso

Rebeca dijo...

Sí señor, ese es el espíritu! : ) muá!

rut dijo...

drac: en filosofía y letras, hay de todo.
damatómica: hombre, claro.
rebella: yeah.

d.

Sabi. dijo...

Está claro que todo se basa en la política.

Me alegro de que las cosas cambien, me alegro de sentir que todo va a tener un cambio de aires.

Eso sí, espero que no todo se base en el politiqueo. Porque, sea por culpa de ello o no, una se quedó de patitas en la calle y con casi 80€ menos por una carta notarial jamás respondida. Tirada en la calle y con un Decano al que más que respetaba, que me dio la espalda.

Espero que las cosas cambien y a mejor.

Un beso mi duendecilla.

rut dijo...

sabi: ¡viva la política universitaria!

d.

Sabi. dijo...

No se puede responder a más, ¿eh? ;-)