jueves, 1 de septiembre de 2005

Narazul.

Duendecilla y Narazul. Hoy pensando, no encontraban bien el comienzo de los lazos. Eran recuerdos vagos, pequeños cristales que habían ido encajando en el tiempo, conformando un espejo, que por diminuto que pareciera, cabían muchas cosas, y... mucha gente. Había sido una tarde preciosa y mientras llegaba a casa, tras haber estado con personajillos de siempre, pensaba en todo lo que habían compartido. Duendecilla escribió un cachito que decía: "Gracias, Narazul. Por la tarde, las metáforas y las sonrisas: grata sorpresa, ¡que duren!. Por las palabras clave, por la frase acompasada de arcoiris. Por la música y por acompañarme gustosamente en el CAMINO de ordenar ideas y sentires. Hasta la próxima aventura: Duendecilla sin gorro, al descubierto".

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me encanta descubrir las palabras que le pones, que me hacen compartir muchas más cosas contigo, me gusta la poesía que llevas dentro... y dejas brotar, yo también la llevo pero no siempre la dejo brotar. Tú haces que me salga de dentro del corazón, y que la comparta contigo con naturalidad. GRACIAS.

Ha sido una tarde preciosa. Me alegro de haberla compartido contigo, de haberla llenado de vivencias, de sueños, de recuerdos... vividos juntas, aunque al principio sin apenas conciencia de ello ni tú ni yo, pero las dos al mismo tiempo.

Gracias, sigue contando conmigo para acompañar ese brotar de ideas, de sentires, de sueños, que poco a poco se van ordenando solos, simplemente porque los compartes conmigo.

Sí, hoy, has sido Duendecilla sin gorro al descubierto, con naturalidad, y vas dejando que el descubierto te sane, te serene, te llene de vida: la que ya llevas dentro. Sigue... al descubierto, descubrirás las respuestas a las preguntas que surgen, brotan, se esconden y huyen... y descubrirás... el AZUL.

Un beso. Narazul.

Anónimo dijo...

"... porque siempre estoy.... aunque solo aparezca suavemente, de vez en cuando, pero sigo en tus sueños.... me encanta soñar contigo..."