martes, 12 de abril de 2005

Un café azul

Una tarde improvisada. Unas fotos. Un café solo con hielo. Un amigo impuntual. Un café con leche y dos bollitos de chocolate. Una cucharilla doblada. Unas hojas con dibujos. Unos libros y una revista. Unas palabras serias. Un diálogo interesante. Una sonrisa. Una sonrisa que se repite. Un camino rápido. Un hombre invisible. Una letra que espera música. Una mesa y frío. Un cadáver exquisito. Un consejo. Un consejo de otra cosa. Una cosa que contar. Una cosa que contar de otra cosa. Un camino a casa. Una sonrisa. Una sonrisa que yo no ví pero que hubo. Unas... horas, y no lentas. Un besillo de duendecillo.

2 comentarios:

Max Verdié dijo...

Y un gimnasio sin estar.
Y una mente sin leer del todo.
Y un personaje guardado en un armario.
Y una tarde a la que al final, le salió la luna.
Y media hora no es tan tarde.
Y canciones aleatorias, sotto-vocce.
Y el frío sin quitar, el de por fuera.
Y navegar sin mirar los decimales.
Y la lluvia en el cristal.
Y una canción antes de serlo.

Ah, y gracias.

lurlien dijo...

hola xiki soy merche, me encanta comp escribes, tanto tu como marina teneis una forma de escribir qpica bastante y ademas da gusto leerlo xq no aburre, sigue asi nena, con respecto a lo del coro dame tiempo, ah una cosa metete en mipagina q esta el boletin oficial del comando bragas y tu yyo somos las boinas verdes, moradas o azules, bess